Financiado por la Reina María Cristina que veraneaba en la ciudad, abrió sus puertas en 1917 y fue la primera Escuela de Damas Enfermeras de la Cruz Roja. Comenzó con 10 camas y funcionó como dispensario gratuito para los pobres y escuela de enfermeras. En 1921 acogió a muchos de los heridos del desastre de Annual. En octubre de 1930, en el mismo emplazamiento, se abrió un nuevo establecimiento, totalmente ampliado, con capacidad para 100 camas. Se cerró en 2002 y fue reconvertido en centro socio-sanitario para atender a personas mayores.